Los progresos científicos cada vez van derribando más obstáculos en materia de salud con enfoque en enfermedades sin cura que afectan al mundo, tal como el alzheimer, parkinson y cáncer, área en que recientemente se dio a conocer un descubrimiento para el glioma grado 2.
El glioma de grado 2 con mutación en el gen IDH logró una gran evolución, ya que gracias a un estudio de un tratamiento oral se detuvo por años el avance del tumor. Para entender esta enfermedad y la importancia de este anuncio científico, el neurólogo de Medicop Alonso Quijada explica las principales interrogantes de este tumor y la diferencia entre el tratamiento comúnmente utilizado y este nuevo descubrimiento.
El cerebro es uno de los órganos que puede desarrollar cáncer, y uno de los tumores cerebrales primarios más comunes en adultos jóvenes son los gliomas. Los adultos menores de 50 años son los más afectados por este tipo de tumor maligno, y es probable que experimenten síntomas focales o difusos, “de perfil temporal subagudo, como cefalea progresiva o persistente, crisis epilépticas, trastorno del lenguaje, de la marcha o trastornos cognitivos de inicio subagudo”, asegura el neurólogo de Medicop.
El avance del tratamiento
Habitualmente los pacientes post operados de gliomas grado 3 IDH-mutante y gliomas grado 2 IDH–mutante con alto riesgo de progresión, recurren y se enfrentan a la combinación de radio-quimioterapia, pero, a pesar de ser un recurso común, en cuanto a resultados este no afecta de manera completamente beneficiosa y significativa, ya que “la radio-quimioterapia mantiene la remisión de la enfermedad, el tratamiento es no curativo y está asociada a numerosos efectos adversos”, afirma el médico.
El nuevo descubrimiento científico abre nuevas posibilidades de tratamiento, ya que “muestra que un medicamento oral (en 1 toma al día) llamado Vorasidenib (un inhibidor de las enzimas mutantes IDH1 e IDH2) mejoró significativamente la sobrevida libre de progresión tumoral y retrasó el tiempo de intervenciones terapéuticas, con un aceptable perfil de seguridad”, explica el neurólogo. Estos resultados muestran un importante avance en el entendimiento y tratamiento de este tipo de cáncer y, tal como menciona el experto, esta innovación se vio posible por “la caracterización molecular y genética del tumor que permite realizar medicina de precisión con Vorasidenib, la que preservó las capacidades cognitivas y funcionales de los pacientes, al detener la progresión tumoral y retrasar los tratamientos agresivos”, concluye el neurólogo de Medicop, Alonso Quijada.