Proteger tu piel del sol no debe ser una preocupación solo de la temporada de verano, ya que los rayos UV están presentes todo el año y los daños que éstos ocasionan pueden ocurrir en cualquier época.
Además de los rayos UV, existen otro tipo de rayos que emiten aparatos electrónicos, los cuales también tienen efectos negativos en la piel.
¿Por qué debo proteger mi piel en invierno?
En la temporada de verano solemos preocuparnos más del cuidado de nuestra piel y de los rayos del sol, ya que asociamos los rayos UV a la presencia de sol.
Sin embargo, aunque las temperaturas estén más bajas, el sol menos intenso y tengamos más días nublados, los rayos UV siguen presentes y pueden ocasionar daños a nuestra piel, pues las nubes solo nos protegen en un 50%.
La exposición continua a los rayos UV puede llevar a un envejecimiento prematuro de la piel, ocasionando arrugas, manchas y pérdida de elasticidad.
¿Cuál es el efecto negativo de la luz azul?
La luz de alta energía visible (HEV), conocida como luz azul, la cual es emitida por celulares, computadores y tablet, también trae efectos negativos para la piel.
Los daños causados por la luz azul son más paulatinos y se le conoce como foto envejecimiento. La luz penetra en las capas de la piel, dañando el colágeno y la elastina causando arrugas, manchas y flacidez.
Por lo tanto, el uso de fotoprotector en lugares cerrados o al estar frente a aparatos tecnológicos es indispensable si queremos cuidar nuestra piel.
¿Cómo protejo mi piel de los rayos UV?
- Usar fotoprotector en invierno y en verano, incluso al estar dentro de la casa
- Si trabajas frente al computador u otro tipo de pantallas, debes usar fotoprotector
- El fotoprotector debes aplicarlo al menos 30 minutos antes de exponerse al sol
- Es muy importante reaplicar cada 3 – 4 horas
